En el último ranking de las supercomputadoras con mayor eficiencia energética del mundo, conocido como Green500, los sistemas impulsados por NVIDIA arrasaron con los tres primeros lugares y se llevaron siete de los 10 primeros. Este buen resultado demuestra cómo la computación acelerada representa el método más eficiente desde el punto de vista energético para la computación de alto rendimiento.
Los tres sistemas principales estaban impulsados por el superchip NVIDIA GH200 Grace Hopper, lo que muestra la adopción generalizada y la eficiencia de la arquitectura Grace Hopper de NVIDIA. A la cabeza del grupo estaba el sistema JEDI, en el Forschungszentrum Jülich de Alemania, que alcanzó unos impresionantes 72,73 Gflops por vatio. Vienen más. La capacidad de realizar más trabajo utilizando menos energía está impulsando la construcción de más supercomputadoras Grace Hopper en todo el mundo.
Acelerando la revolución verde en la supercomputación
Estos logros subrayan el papel fundamental de NVIDIA en el avance de la agenda global para la informática sostenible de alto rendimiento durante la última década. La computación acelerada ha demostrado ser la piedra angular de la eficiencia energética, y la mayoría de los sistemas en la lista Green500 (incluidos 40 de los 50 principales) ahora cuentan con esta tecnología avanzada.
La computación acelerada, iniciada por NVIDIA, utiliza GPU que optimizan el rendimiento (haciendo muchas cosas a la vez) para realizar cálculos complejos más rápido que los sistemas basados únicamente en CPU. La arquitectura Grace Hopper está demostrando ser revolucionaria al mejorar la velocidad computacional y aumentar drásticamente la eficiencia energética en múltiples plataformas. Por ejemplo, el chip GH200 integrado en los sistemas Grace Hopper ofrece más de 1000 veces más eficiencia energética en tareas mixtas de precisión e inteligencia artificial que las generaciones anteriores.
Redefiniendo la eficiencia en la supercomputación
Esta capacidad es crucial para acelerar tareas que abordan desafíos científicos complejos, acelerando el trabajo de los investigadores en diversas disciplinas. La tecnología de supercomputación de NVIDIA sobresale en los puntos de referencia tradicionales y ha establecido nuevos estándares en eficiencia energética. Por ejemplo, el sistema Alps, en el Centro Nacional Suizo de Supercomputación (CSCS), está equipado con NVIDIA Grace Hopper GH200. Un subconjunto optimizado del sistema, denominado preAlps, ocupó el quinto lugar en el último Green500. CSCS también envió el sistema completo a la lista TOP500, registrando 270 petaflops en el punto de referencia Linpack de alto rendimiento, utilizado para resolver ecuaciones lineales complejas.
Las clasificaciones Green500 destacan plataformas que brindan un rendimiento FP64 altamente eficiente, lo cual es crucial para las simulaciones precisas utilizadas en la informática científica. Este resultado subraya el compromiso de NVIDIA de potenciar las supercomputadoras para tareas en una amplia gama de capacidades. Esta métrica demuestra un rendimiento sustancial del sistema, lo que lo lleva a ocupar un alto puesto en la lista TOP500 de las supercomputadoras más rápidas del mundo. La alta posición en la lista Green500 indica que este rendimiento escalable no se produce a costa de la eficiencia energética.
Tal rendimiento muestra cómo la arquitectura Grace Hopper introduce una nueva era en la tecnología de procesamiento, fusionando funcionalidades de CPU y GPU estrechamente acopladas para mejorar no sólo el rendimiento sino también mejorar significativamente la eficiencia energética. Este avance está respaldado por la incorporación de un enlace optimizado de alta eficiencia que mueve datos entre la CPU y la GPU.
La próxima plataforma Blackwell de NVIDIA se basará en esto al ofrecer la potencia computacional de la supercomputadora Titan lanzada hace 10 años (un sistema de 100 millones de dólares del tamaño de una cancha de tenis), pero será lo suficientemente eficiente como para ser alimentado por un enchufe de pared como un típico electrodoméstico.
Relación con las Criptomonedas
La revolución en la eficiencia energética liderada por NVIDIA no solo tiene implicaciones significativas para la supercomputación, sino también para el mundo de las criptomonedas. Las criptomonedas, como Bitcoin y Ethereum, dependen en gran medida de la computación intensiva para procesos como la minería y la validación de transacciones. Estos procesos requieren una cantidad considerable de energía, lo que ha generado preocupaciones sobre su impacto ambiental.
La adopción de tecnologías avanzadas como la arquitectura Grace Hopper puede transformar la industria de las criptomonedas al reducir drásticamente el consumo energético asociado con la minería. La eficiencia energética mejorada significa que los mineros pueden realizar más operaciones con menos energía, disminuyendo la huella de carbono de estas actividades. Además, con la evolución hacia tecnologías más eficientes, como las GPUs avanzadas de NVIDIA, el coste de la minería puede reducirse, haciendo que esta actividad sea más accesible y sostenible.
El enfoque de NVIDIA en la sostenibilidad también se alinea con los movimientos dentro de la comunidad de criptomonedas para desarrollar soluciones más ecológicas, como la transición de Ethereum a un modelo de prueba de participación (PoS) que consume menos energía en comparación con el modelo de prueba de trabajo (PoW). En resumen, la innovación en eficiencia energética no solo redefine la supercomputación, sino que también puede desempeñar un papel crucial en la evolución de las criptomonedas hacia prácticas más sostenibles.
Un futuro definido por la innovación sostenible
Mientras NVIDIA continúa superando los límites de lo que es posible en la informática de alto rendimiento, sigue comprometida con mejorar la eficiencia energética de la infraestructura informática global. El éxito de los superordenadores Grace Hopper en el ranking Green500 destaca el liderazgo de NVIDIA y su compromiso con una informática global más sostenible. A través de estas innovaciones, NVIDIA no solo impulsa avances científicos, sino que también allana el camino hacia un futuro más verde y eficiente energéticamente, beneficiando tanto a la supercomputación como a la industria de las criptomonedas.
https://blogs.nvidia.com/blog/green500-energy-efficient-supercomputers/